El 11 de marzo se conmemora el centenario del nacimiento de Astor Piazzolla, bandoneonista y compositor argentino.

Adiós Nonino, toda composición tiene una historia detrás

Se trata de un tango compuesto en 1959, como homenaje a su padre, Vicente Piazzolla.

Piazzolla se encontraba en Puerto Rico, realizando una gira por Centroamérica cuando recibió la noticia de la muerte de su padre a causa de un accidente de bicicleta. 

Una mala noticia que se sumó a una gira sin demasiado éxito, problemas económicos y a la enorme nostalgia que le producía estar lejos de su tierra. 

Un cocktail explosivo que llevó a Piazzolla a la depresión.

Hoy, adiós nonino es una realidad

Giras inexistentes, paradas económicas forzosas, no pudiendo volver a nuestra tierra, sin poder abrazar a las personas que más amamos y teniéndonos que despedir de aquellas otras a las que no volveremos a ver. ¿Te suena?

Llevamos décadas avanzando por inercia, de prisa, sin detenernos en el detalle. Hasta el pasado marzo, con la llegada de la pandemia y el confinamiento absoluto, todo ha sucedido como un timelapse; una visión a cámara rápida de la realidad, sin pararnos a disfrutar de la cotidianidad, que ahora añoramos.

Recuperar esta pieza, de un gran maestro, era para mí una obligación porque hoy es absoluta actualidad.

Llevamos años viviendo en un timelapse y hoy es el momento de parar, echar la vista atrás y recuperar los clásicos.

Tras nuestro timelapse llega la regresión

Los grandes compositores clásicos, cuentan historias que hoy se repiten, narran historias que hoy nos toca revivir.

Adiós Nonino es una de ellas y esta es mi adaptación, espero que te guste.